domingo, 21 de diciembre de 2014

No voy a hablar de la suegra

Y menos de la mía que es estupenda! Ni del cuñado, ni de la sobrina...
Ni de lo mucho o poco que nos puede apetecer la dichosa reunión en casa de...
Hoy querría hablar de sumar.
Se acerca la Navidad y lo normal es que todos nos reunamos con miembros de nuestra familia y de "su familia" a los que normalmente vemos menos y entre los que puede haber personas que nos resulten mas o menos gratas. Y ante eso uno puede aplicar su filtro y entrar en el planteamiento:

" pues como este igual de borde que siempre yo no pienso hacer ni el más mínimo esfuerzo"

O uno puede pensar en sumar. Y en sumar pensando en el otro. Me explico.
Todos tenemos claro que estamos unidos a la persona que elegimos y no a toda su parentela. Por supuesto. Pero también tenemos muy claro que una de las claves principales del éxito de nuestra relación es precisamente buscar siempre el modo de hacer feliz a la otra persona. Y resulta que parte muy importante de su felicidad es su relación con su familia de sangre y por eso a ti te toca facilitarle las cosas en estos días de convivencia más estrecha. Hacer que disfrute con ellos y que te vea a ti bien también. No se trata de convertirte en compañero inseparable de juegos de tu suegro o de que no salgas de la cocina en casa de tus cuñados. Se trata sencillamente de poner de tu parte para que el clima sea el mejor. Buena cara, buen ambiente y sobre todo repito pensar en la felicidad y en el disfrute del otro . Con eso disfrutaremos seguro los dos.
Y si surge la necesidad de aplicar este principio no lo dudes: siempre del lado del contrario!! Es decir:
Si tu pareja tiene algún encontronazo con alguien de su familia y ves que lo pasas mal por eso mientras te lo esta contando, trata de disculpar al miembro de su familia tratando de facilitar el retorno a la normalidad. No se te ocurra abundar en la brecha porque le harás sufrir mas y además te saldrá " el tiro por la culata" porque muy probablemente se vuelva en tu contra por contribuir a la
crítica de esa persona de su familia.

Así que, a sumar! A llegar a mas en nuestros círculos concentricos en estos días!
Eso si , cuidando mucho el circulo principal que sois vosotros dos.

martes, 9 de diciembre de 2014

Cuestión de prioridades

Ahora que se acerca el 31 de diciembre y que oiremos tanto de balances de final de año, de lo que hemos ganado y perdido...creo que es un buen momento para que nos paremos a evaluar si hemos ganado o perdido en nuestra relación de pareja.
Si le estamos dedicando tanto como pensamos. Si realmente es el activo más importante en nuestra vida...
En definitiva, si de verdad es nuestra prioridad.

Haz la prueba. Piensa cuales son a día de hoy aquellos aspectos de tu vida a los que dedicas mas tiempo, mas energía y empeño. Saldrán unos cuantos. ¿En que posición aparece algo relacionado con tu pareja?
Puedes decirme:
"es que precisamente mi relación no me preocupa por eso no aparece entre las cuestiones de mayor dedicación."
A lo que te diría que no debemos olvidar que la relación de pareja es de esas relaciones horizontales que hay que mantener vivas siempre. A diferencia de las verticales como las de hijo hacia la madre o el padre hacia el hijo que sobreviven prácticamente solas.
Una pareja se constituye porque los dos quieren y ese querer se debe mantener vivo y saludable por la dedicación y el empeño de los dos día a día.
No podemos caer en aquello de que la cuerda siempre se rompe por el lado más delgado.  Y que el más delgado sea el de nuestra relación.  Frente a otros cabos más gruesos como puedan ser nuestro trabajo, nuestra prosperidad económica o nuestro éxito en general.
Piensa un poco en esta frase:
" cuando te hayas ido, ni tus clientes, ni tus socios, ni tus colegas te recordaran, solo vivirás en la memoria de tu familia"
Y así es. Pero no por eso vamos a poner nuestra relaciones en el primer puesto de la lista de prioridades, sino porque nos da la gana.
Porque tienes claro lo que de de verdad vale la pena en tu vida.