lunes, 12 de octubre de 2015

MANTENER LA PASIÓN


“La llegada de los niños, las noches de insomnio, la bronquiolitis...todo eso se lleva la pasión por delante”. 
“Con el paso de los años lo que va quedando es otra cosa: más compañeros, menos amantes...mas estable supongo”.
Frases como estas, por no caer en algún mal titular como “el matrimonio es la sepultura de la pasión” son las que me hacen escribir hoy, de nuevo tecleando en el Ipad volviendo de viaje. 
¿Qué es eso de la pasión? ¿Qué ingrediente es ese que parece diluirse en el primer bocado? ¿Tiene sentido mantener una cierta melancolía ante su pérdida?
A ver lectores y lectoras enamorados desde hace años: 
¿Echáis de menos el hormigueo en el estomago? 
¿El pálpito veloz al acercarnos a su casa? 
¿Cambiarías eso por lo que tenéis hoy?
Yo creo que la pasión es querer estar siempre contigo. 
Fundirnos en un abrazo denso, denso.
Preferirte a cualquier plan alternativo. 
Saber que mi vida sin ti no tiene ningún sentido.
Sentir que tu ausencia no la llenan ni siquiera nuestros hijos. 
Estar cenando con amigos y mirarte en silencio pensando cuanto me gustas.
Eso es pasión. 

domingo, 4 de octubre de 2015

SIN COMPARACIÓN


La comunicación entre el y ella debe ser fluida espontánea, natural...pero hay ciertos códigos que debemos seguir.
 Y si hay algo que debemos desterrar para siempre en nuestros intercambios, es la comparación. Yo diría más, creo que hay que huir de la tentación de comparar, ni siquiera interiormente, a mi marido a mi mujer, con cualquier otra persona. 
Ella, el es irrepetible. ( afortunadamente pensara alguien...) y la comparación además de ser una tontería que no lleva a ningún lado, es una falta de consideración seria. 
Se podría comparar un aspecto de la persona, por ejemplo Nadal juega al tenis mejor que Juan. ¿Y qué? 
Sin embargo, lo que no puedes comparar es la persona en su totalidad y eso es lo que importa de verdad. Con la persona se convive, con una o dos cualidades no. 
En fin, no seamos tontos y desterremos de verdad y para siempre esa boba tendencia. Hasta el refranero nos lo dice:
La vaca del vecino siempre da mas leche que la mía 
Pues eso, atiende y cuida a la tuya, verás como acaba dando la mejor leche del mercado

lunes, 28 de septiembre de 2015

PERDONAR SIEMPRE


Vivir juntos y que haya roces es todo uno. Sin que se trate de grandes cosas. Con frecuencia son diferencias de opinión, de visión o de sensibilidad las que nos pueden llevar a enfrentarnos. 
Y en la confrontación y con el ánimo caliente podemos lanzar dardos o hacer cosas que duelan. 
El perdón es la salida. 
Ten la sencillez de decir:
"Lo siento de verdad, lo he hecho fatal" 
"perdóname, de verdad, no pretendía hacerte daño"
Y ten grandeza de alma para perdonar de verdad. 
Porque muy probablemente el dolor que sientes no era buscado. Con frecuencia la ofensa viene más de no saberlo hacer mejor que de mala intención. Y en este segundo caso, tantas veces es fruto de esa subida de temperatura...que hay que saber controlar, eso si.
Pero lo más importante es que entre dos que se quieren debe existir esa capacidad para entender que el otro no es perfecto, ni de lejos. Y tu tampoco. Por lo que los dos necesitáis ese espacio de frenada. Para parar sin pegárosla y recuperar la ruta.
Y seguir amando y sabiendo que nos puede defraudar en un momento dado.
 El perdón nos libera del veneno del rencor. Nos devuelve la serenidad. 
Y nos da la capacidad para seguir caminando juntos. Con los pies de barro. 

domingo, 20 de septiembre de 2015

Un seguro de vida para la pareja


Recuerdo que hace años hicimos un curso para parejas en el que analizábamos casos para sacar consecuencias y aprender. 
Sandra solía comentar invariablemente:
“tienen un problema de comunicación”
Y nos reíamos, pero tenía razón. Es absolutamente habitual que los problemas en la pareja tengan una raíz en la falta de comunicación. Así que está clara la prevención no? 
Y no es tan sencillo como pueda parecer, en primer lugar hay cuestiones de carácter: los hay más reservados incluso crípticos.Luego están los ritmos de vida, horarios, distancias... 
Y puede ocurrir que vivamos en un semi aislamiento. Y si, probablemente no pase nada, al menos a corto plazo. Pero es evidente que estamos abonando el terreno para que cualquier mala planta pueda crecer. 
Así que vamos a reservarnos ese tiempo blindado al final del día para estar solos los dos y sin interrupciones.
 Sin hijos en medio sin pantallas. Sólo los dos y mirándonos a los ojos. Desaguando el uno en el otro. Eso si que es un seguro de vida para la pareja 

domingo, 13 de septiembre de 2015

RECOMENZAR


Ahora toca volver a la normalidad. Después de semanas de extraordinarios, del tipo que sean, retomamos el ritmo habitual.
-Menos mal porque sin colegio, los cinco metidos en casa, con el pequeño malo....Cristina y yo nos hemos mandado a la porra en distintos idiomas ya-

Cada año nos encontramos con noticias del tipo:
Aumentan las demandas de separación tras las vacaciones de verano
Y desde el punto de vista estadístico es verdad, pero normalmente la relación que se resiente del exceso de convivencia es aquella que ya estaba muy tocada. 
Pero, que duda cabe, la convivencia más estrecha puede ser y de hecho es, un buen banco de pruebas para ver como estamos de verdad el uno con el otro. Y quizás ahora que arranca el curso sea 
un momento excelente para marcar objetivos juntos.
-Venga, nos vamos a apuntar por fin a ese curso de baile los jueves por la noche, que si no no hacemos nada juntos-
O sencillamente:
-Lo de salir a pasear todos los días un rato al final del día, lo vamos a mantener durante el curso-
Metamos cabeza. Pensemos lo que no hicimos tan bien el curso pasado y rectifiquemos. Nuestra relación es un organismo vivo y como tal, cambia se adapta y evoluciona para mejorar. 
Estamos a tiempo. 

domingo, 19 de julio de 2015

PAREJA ANTES QUE PADRES


A todos los que tenemos hijos esta semanas se nos presentan como un desafío. Cómo ocupar el tiempo de nuestros hijos de una manera inteligente. Donde enviarlos donde no...
Decisiones que debemos tomar juntos los dos. Y juntos en estos días y semanas pasaremos mucho mucho tiempo todos los miembros de la familia.
Ellos y nosotros, así, ellos y nosotros.
Nuestros hijos deben vernos como un todo unitario. Casi diría un bloque monolítico. 
Bien es verdad que a medida que van creciendo pueden apreciar y valorar las diferencias entre papá y mamá. Incluso será para ellos una buena escuela de cómo lidiar con las diferencias de opinión en la intimidad. 
Pero hasta que llegue esa edad de adulto o casi adulto, nuestros hijos deben encontrar en nosotros seguridad, un referente fiable. 
Por eso este tiempo de vacaciones es un observatorio magnífico para ellos. No perdamos la oportunidad, ejercitemos el diálogo el consenso entre nosotros dos. 
Pongamos muy en activo eso que sabemos bien aunque a veces se nos puede olvidar: antes que padres somos pareja. La elección la hicimos el uno por el otro, ellos vinieron después. Y así debemos vivirlo siempre, ellos nos lo agradecerán y mucho. 

domingo, 5 de julio de 2015

EN DISTINTA FRECUENCIA


Muchas veces las discusiones que surgen entre él y ella se deben sencillamente a que están sintonizados de modo distinto. Lo que para uno es un agravio tremendo para el otro resulta irrelevante. 
Un mismo hecho puede ser motivo de preocupación permanente para uno y caer automáticamente en el olvido en el caso del otro. 
El problema es que muchas veces esperamos la reacción que nosotros tendríamos y eso es sencillamente imposible. De un modo inconsciente parece como si buscáramos en la otra persona nuestro propio patrón.
¡Menuda tontería! ¡pero que fácilmente caemos en ella!
Si nos paramos a pensarlo bien seguramente lo que nos atrajo es lo que nos diferencia, lo que nos equilibra, lo que nos complementa. 
Y todo eso es lo mismo que hace que percibamos las cosas de manera a veces tan distinta.
Querer a la otra persona implica un cierto grado de incomprensión ante sus actos. Nuestra limitada cabeza no alcanzan a comprender todas las conexiones neuronales ajenas. 
Tu pareja no dejará nunca de ser un misterio insondable. 
Y los misterios infunden respeto y una cierta fascinación. Pues eso.